Explicar: El patito feo
Buenos días,
Hoy, Día internacional de la Tolerancia vamos a recordar un cuento tradicional.
A la llegada del verano, Doña Pata estaba incubando sus huevos. Los dos pequeños patitos nacieron sin novedad, pero el tercero se resistía. Por fin vio la luz. Era grande y muy distinto a sus hermanos.
El pobre Patito fue despreciado por sus familiares y compañeros, quienes le echaron. Como es natural, se sintió muy desgraciado, pues él quería jugar con sus hermanitos. No tuvo más remedio que marcharse de allí.
Así que, nadó río abajo, en busca de su destino. Pasó incontables peligros. Todos los animales del bosque se habían propuesto cazarle. Perros, gatos y zorros acechaban sus menores movimientos. El pobre Patito pasó mucho miedo, pues se encontró con una bandada de patos salvajes que lo despreciaron por su apariencia.
A la llegada del invierno, una viejecita se apiadó de él y se lo llevó a su casa. Sin embargo, al llegar la primavera, tuvo que salir a escape, porque el hijo de la mujer se había empeñado en hacer de él un buen guiso.
El Patito caminó y caminó hasta que llegó a un tranquilo lago, donde una bandada de cisnes, blancos como la nieve, le tomaron como uno de los suyos. Lo acogieron y llenaron de amor.
El Patito, al mirar su reflejo en el agua, vio que no era feo, sino un cisne de aquellos.
Solo ahora recordaba con alegría todas las penas y desgracias pasadas. Ahora comprendía su felicidad ante la maravilla que lo rodeaba.
El personaje del Patito Feo es señalado y humillado constantemente por su “fealdad” respecto a sus hermanos y familiares. Las actitudes de los personajes con el protagonista nos enseñan que, a veces, juzgamos solo por las apariencias.
Un día, el Patito Feo decide iniciar un periplo que lo ayuda a fortalecer su autoestima y a descubrir que no era feo, sino diferente.. Este cuento clásico escrito por Hans Christian Andersen en 1843 puede ser un gran ejemplo para inculcar el valor del respeto a las diferencias. Al mismo tiempo que hace reflexionar sobre la aceptación.
más ffeo que yo
ResponderEliminarNo hay que creer las cosas feas que te dicen los demás. Mateo G.
ResponderEliminarNo decir cosas feas a los demás por envidia. Zhoe
Siempre respetar a los demás. Amalia
Repartir los juegos, cada día elegir diferentes juegos, al gusto de cada niño participante. Izan
Hacer caso a nuestro corazón. Emely
Si aprendes a leer, conoces historias nuevas y bonitas para vivir mejor. Samuel
El pato tiene que creer en Dios y confiar en él. David
Que nadie te diga que no puedes jugar por tu aspecto. Anne
Cuando estaba en Infantil mi amiga no me dejaba ir con otros amigos. Ahora ya sé que puedo elegir e ir con otros niños. Daniela
Somos niños y niñas de Primaria.
ResponderEliminar1• C Patos lacitos y granjeros
Tienes que querer a tu madre y hermanos. Martina
ResponderEliminarHay que confiar en los demás. Luca
Queremos amar a Dios y a María. Kylie
Escuchar y respetar a Celia y a Cisne. Leah
Nos cuidamos todos. Kyllian
Hay que escuchar a Dios. Sara A.
Ayudar a los amigos que lo están pasando mal. Paula
Querernos todos. Sofía
Hay que cuidar a todos . David
Mejor tener buenos amigos y respetar su manera de ser. Nicolás
Tirar los desperdicios en el contenedor adecuado. Ameli
No escuchar los mensajes feos para desanimarte. Daniel
No tener envidia de los amigos y no echarles la culpa. Guille
No insultar a los demás. Mateo
No tener envidia de como son los demás. Alegrarme de sus alegrías. Sara S.
Amarnos todos. Cristina
No empujar a los amigos. Irati
Somos la clase de 1º A, los patitos reyes.