Aprender: A de Autonomía

Hemos llegado al final de la palabra Gabrielista coincidiendo casi con el final del curso.  A de Autonomía.

Ser una persona autónoma significa ser capaz de hacer cosas por ti mismo/a sin necesitar mucha ayuda de los demás. Es como cuando aprendes a atarte los zapatos o a prepararte el desayuno: al principio quizás necesitas ayuda, pero con el tiempo, practicas y llegas a hacerlo solo/a. Cuando eres autónomo/a, puedes tomar decisiones sobre cosas que son importantes para ti. Por ejemplo, decidir qué ropa quieres llevar, preparar tu mochila para la escuela u organizarte para realizar los deberes.

De nuevo, el ejemplo de San Luis María nos ayudará a entender mejor este punto.

Cuando San Luis María de Montfort era joven, decidió que quería ayudar a los demás y llevar el mensaje de Jesús a mucha gente. Dejó su casa y fue a estudiar para ser sacerdote. Esto no fue fácil porque no tenía mucho dinero ni recursos, pero no se rindió. Una vez ordenado sacerdote, Montfort viajó por muchas ciudades y pueblos a pie, predicando y ayudando a la gente. A menudo dormía en sitios sencillos y comía lo que la gente le daba. Fundó escuelas y comunidades religiosas para ayudar a niños y pobres. Todo esto lo hizo por sí mismo, con mucha determinación y fe. No esperó a que alguien lo hiciera por él, sino que tomó la iniciativa e hizo todo lo posible para ayudar a los demás y seguir su misión. Así, Montfort nos muestra que ser autónomo significa tomar nuestras propias decisiones y trabajar duro para conseguir nuestros objetivos, incluso cuando las cosas son difíciles."

Para nosotros, que todavía somos pequeños/as, es importante recordar que ser autónomo no significa que tengas que hacer las cosas solo/a todo el tiempo. A veces, todos/as necesitamos ayuda y está bien pedirla. Pero ser autónomo/a significa que estás aprendiendo y haciendo más cosas por ti mismo/a a medida que creces.