Mirar: Piper

 


Una bandada de "playeritos blancos" busca alimento en una orilla, corriendo a picar en la arena cuando la ola se retira y retirándose cuando vuelve. Un polluelo es alentado por su madre para unirse a la bandada, pero no retrocede a tiempo y es bañado por las olas. El incidente deja al polluelo asustado del agua; negándose dejar el nido, pero pronto se da cuenta de que un grupo de cangrejos ermitaños, cavan en la arena para encontrar comida enterrada a más profundidad y así evitar ser golpeados por la marea. Imitando su comportamiento, empieza a ver la belleza del mundo submarino y se vuelve experto en conseguir comida para la bandada.

El pequeño polluelo aprendió una gran lección: aunque a veces tengamos miedo, siempre hay algo nuevo que descubrir. Ayúdanos, Jesús, a ser valientes como él, a no rendirnos cuando algo nos asuste, y a confiar en que siempre podemos aprender de los demás. 


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